Al estilo de un cónclave en el que no hay humo blanco, la Universidad del Atlántico (Uniatlántico) se quedó sin rector en propiedad. Una más de una decena de recusaciones contra varios miembros del Consejo Superior obligó a aplazar la sesión definitiva que definiría al líder de la institución para el periodo 2025-2029.
Una «lluvia de recusaciones» contra varios miembros del Consejo Superior de la Universidad del Atlántico (Uniatlántico) frustró este viernes la jornada de elección del nuevo rector para el periodo 2025-2029. Tras más de ocho horas de tensa sesión, la votación fue oficialmente aplazada hasta que las autoridades competentes resuelvan las impugnaciones.
Se conoció que se presentaron al menos 17 recusaciones contra integrantes del Consejo Superior, obligando a levantar la sesión en la Gobernación del Atlántico. Ahora, la Procuraduría General de la Nación deberá estudiar y emitir un concepto sobre la validez de estas impugnaciones.
El propio gobernador del Atlántico y presidente del Consejo Superior, Eduardo Verano De la Rosa, fue recusado en tres ocasiones.
Uno de los principales argumentos en su contra fue el presunto conflicto de intereses debido a su posición como jefe inmediato de Leyton Barrios, quien hasta hace poco fungía como Secretario de Educación del departamento y es uno de los cinco aspirantes a la rectoría.
Otra de las recusaciones claves se fundamentó en que varios integrantes del Consejo Superior aprobaron la resolución que permitió la reelección inmediata de los rectores, lo que abrió la puerta a la inscripción del actual rector, Danilo Hernández, quien busca un nuevo periodo.
Antes de dar por finalizada la sesión, el Consejo Superior designó a la abogada Josefa Cassiani, secretaria general de la universidad, como rectora encargada de la institución. La fecha para retomar el proceso de elección dependerá de la celeridad con la que la Procuraduría resuelva las recusaciones presentadas.
